
El Mundo Según Henrry
// Parte 6 //
Lo siento dijo Cristin, pero es difícil dominarme cuando alguien habla despectivamente de las habilidades en una mujer, dijo mirando por el retrovisor a Dumy con cara de pocos amigos.
Este iba a replicar cuando sintió entre sus costillas un codazo que le quito el aire, Henry lo miro seriamente mientras le preguntaba: tienes algo qué decir a ese respecto Dumy
Si, dijo éste, con voz entrecortada, lo siento Cristin, no debí dudar de tus habilidades.
Cristin lo miro con ternura:
Perdóname tú, creo que soy algo susceptible a ese respecto…
Susceptible, dijo retadoramente el chico, pero luego decidió callarse mientras Jacob movía su codo peligrosamente hacia él. Tienes razón Cristin, nadie debe dudar de las capacidades de otros, perdona…
La discusión llego a un término feliz mientras llegaban al lote de autos. En el lugar un hombre mayor, de apariencia impecable les recibió:
Buenas tardes señorita, desea cambiar ese viejo auto por algo que sirva?
Dumy bajo su cabeza, mientras una risotada parecía quedarse enredada en su garganta.
La chica carraspeo molesta: No, mi auto es una joya, no me da problemas, pero iré con unos amigos demás y necesito un vehículo más grande…
De doble tracción, dijo Dumy acercándose a ella. Oh si, dijo ella repitiendo, doble tracción…
Y color rojo, dijo de nuevo el chico, siempre he soñado con tener un auto así …
Y rojo… de pronto el rostro de la chica pareció entender el juego del chico y dijo al vendedor:
Mire, el auto debe ser amplio y fuerte, seremos varias personas con sus respectivos equipajes, lo demás no me interesa mucho.
El chico dio un puntapié al suelo, la joven era lista. No se dejaría manejar fácilmente. El vendedor la llevo a mirar algunos estilos, pero en cuanto Dumy miro aquella Hummer color negro su corazón dio un vuelco, era una preciosidad. Sus ojos se derritieron notando sus detalles, y cuando se acerco mirando por la ventanilla lo supo, estaba enamorado. CD, televisor de pantalla plana, accesorios de lujo. Miro hacia donde se hallaban Henry y Jacob, llego hasta ellos diciendo:
Tengo el auto perfecto, miren, mientras les halaba de sus ropas. Los fantasmas vieron el auto, era hermoso, un auto de verdad pensaron los tres. Jacob miro la pancarta del precio. El dinero de la tienda de empeño no alcanzaría, y se lo hizo saber a Henry. Pero Dumy acertadamente dijo:
El tipo de la tienda nos estafó, pero este es un verdadero vendedor, quizás si al efectivo le sumamos unas monedas… la idea pareció estupenda al grupo; pero conociendo a Cristin, Dumy temía que el auto escogido por ella sería una versión eléctrica del Prius. Los tres se confabularon contra la chica, Dumy se alejaría por el momento, dudaban que Cristin olvidara tan pronto el exabrupto del chico; el plan era sencillo. El auto era grande, suficientemente masculino, les llevaría con seguridad mientras buscaban las familias descendientes de los marineros del Atajo y el cofre estaría a salvo en él. Dumy debería verse desinteresado y la idea partiría de Jacob y su afán por proteger el cofre. Miraron como de lejos el vendedor mostraba a la chica algunos bellos autos en color dorado y rosa; se dirigieron rápidamente hacia Cristin. Ella les miro mientras pedía al vendedor explicara las atribuciones de los autos que ella elegía:
Automático, capacidad para seis personas, un auto familiar…
Demasiado bajo dijo Henry
Demasiado lento, dijo Jacob
Demasiado verde, apunto Dumy
Uno a uno el lote de autos fue recorrido por el vendedor, hasta acercarse a los autos grandes
Cristin miro buscando a Dumy mientras se decía: esto debe ser idea del chico.
Pero se sorprendió al verlo vagando por la sección de botes. Jacob y Henry miraron el auto negro. Jacob fue el primero en hablar.
Me parece adecuado, protegerá el cofre. Pregunta si es veloz, y si puede ingresar a cualquier terreno, incluida una playa.
Ella obedeció, pregunto al vendedor, los ojos de éste brillaron codiciosamente, la venta de estos autos había descendido en el mercado de manera abrupta, estaba con un jugoso descuento, además tenía accesorios de lujo increíbles, y el precio… llegarían a un acuerdo.
Una vez dadas por el hombre sus características y ventajas la joven dijo que lo pensaría un momento mientras conversaba por teléfono con sus amigos acerca de las ventajas de comprar este auto. Cristin se dirigió hacia su auto, una vez allí , pregunto a los fantasmas si estaban locos?
Ese auto es un tanque, gastara cientos de litros de gasolina, saben ustedes lo que es el calentamiento global. Oh seguro que no, o tal vez ni siquiera les interese. Saben el tamaño del agüero de ozono en nuestro planeta; este auto es una bazuka contra el ambiente.. yo opino que deben elegir el pequeño auto eléctrico, tiene velocidad, pasara desapercibido, se imagina que uno de los descendientes viva en un barrio marginal… pareceremos vendedores de estupefacientes, creo que deben pensarlo.
Dumy iba acercándose, pero una señal de Jacob lo hizo pasar de lejos para ir a la máquina expendedora de golosinas.
Henry miro a Cristin mientras le decía:
Mira Cristin creo que Jacob tiene razón, el cofre estará bien protegido, además también lo estarás tú. Sé algo del calentamiento global, me interesa el ambiente, pero Jacob y yo no hemos contribuido al agujero en la capa de ozono, contrario a eso durante mucho tiempo hemos sido ambientalistas, o no es así Jacob? dijo socarronamente, será por el tiempo justo para encontrar a esas familias, luego lo podrás donar a alguna causa a favor del ambiente, y en lo referente a las familias creo que estás siendo un poco prejuiciosa a ese respecto . Dudo que por su raza o color pueda saberse los lugares en que vivirán, de todas maneras Jacob tiene razón, lo principal en este momento es mantener a salvo el cofre.
Cristin se sintió avergonzada de su último comentario, estaba debilitada en esa batalla, el vendedor se acercó dando la última estocada:
Podría darle el mejor precio en toda la ciudad, y será suyo.
Ella les miro, aceptó, mientras caminaban hacia la oficina del lugar a cerrar el trato, la joven le dijo al vendedor que tenía una parte del dinero consigo y algo de plata en monedas valiosas, por lo que la compra seria al contado. El vendedor sonrió con satisfacción, mientras Dumy se acercaba…
Es el auto chico, dijo Jacob.
Dumy se acerco haciendo reverencias mientras estampaba sendos besos a la carrocería del Hummer.
En tanto el hombre de la compraventa Millot Berse, llamaba a su jefe:
Una joven vino a cambiar unas monedas de plata, si me lo preguntas creo que son del tesoro de Frederick Jacob, consulte al viejo profesor Luis; son de la época Jhony, el bolso tintineaba cuando saco las tres monedas, estoy seguro que la chica portaba más de las que logre comprar. Tiene un viejo camaro amarillo, envíe a Pies a seguirla, me acaba de llamar, a qué no sabes que compro la niña, pues nada menos que un auto Hummer, luego se dirigió a la playa, pero Pies no supo qué paso en el lugar, dice que una tormenta de arena cayo sobre él, no pudo ver más que el momento en que la chica llevaba al auto nuevo arrastrando al camaro. Se ha hospedado en el hotel Sol Dorado.
Del otro lado de la línea una voz apagada y ronca dijo:
No debemos perderla de vista; nadie ha visto más de dos monedas juntas, pregunta al vendedor de autos si cerraron el trato en efectivo. Envía a Pies, si el tipo no desea colaborar dile que Sombra desea saberlo. No se resistirá a brindar la información.
Capitulo 9 // Lorn un Amigo Leal
Esa noche en el hotel, Cristin se comunica con Lorn, necesitan ayuda. Alguien debe conducir el Hummer. Este acepta de inmediato, deja la taberna en manos de su esposa Emily, hace tanto tiempo de su última aventura, se siente joven de nuevo: sus fantasmas lo necesitan! Henry fue el primero en saludarle cuando llego al hotel. Lorn les relato como en la recepción mientras le daban el número de habitación donde se encontraba Cristin un hombre con mala pinta preguntaba por una chica hermosa de cabello pelirrojo dueña de un Camaro amarillo.
Te lo dije clamó Cristin alarmada mientras miraba a Henry. Estoy segura que el tipo de la compraventa debe tener algo que ver con el asunto.
No te preocupes dijo Dumy, te protegeremos .
Puajj ¡ dijo burlonamente Lorn, tú y cuántos más?
El capitán Frederick entro del balcón mientras decía: al menos uno más.
Lorn palideció dando un paso atrás. Quien es usted ? pregunto con miedo.
Soy Frederick Jacob contesto este .
Lorn miro a Henry diciendo: Estaís locos! Es un fantasma terrible, su maldad es bien reconocida en Cabo San Lucas, torturaba a sus marineros, dicen que…
De igual manera es un placer para mí el conocerle, dijo el fantasma sonriendo. Cuando se acercó a Lorn estirando su mano hacia él, el tabernero enloqueció:
Aléjate demonio! Chus, chus, que se vaya el diablo y venga Jesús, decía con frenesí mientras se santiguaba.
Je,je je Dumy rió con fuerza. Ehh dijo, y yo creía que era el chico, porque no pones frente a él un crucifijo?
Eres un tonto! Dijo con ira Lorn, todo el mundo sabe que los crucifijos son para los vampiros.
Esta vez Henry fue el que rió: es un compañero , explicó a Lorn, debemos ayudarle encontrando quince descendientes de los marineros esclavos del Atajo. Para ello necesitamos tu ayuda. El tesoro está dentro del auto Hummer, tú lo llevarás hasta la ciudad, lo ocultaremos en la taberna.
Quéee dices ¡ gritó Lorn, ese tesoro debe estar en un banco, es peligroso andarle por allí como si se tratara de una bolsa con víveres.
Oh por supuesto dijo Cristin, solo iremos tú y yo; ah lo olvidaba, Jacob también irá para decir que es su tesoro y que desea invertirlo en acciones…
Bueno dijo Lorn, sé que es algo difícil, pero es muy peligroso andarlo por allí…
No te preocupes Lorn, nosotros te ayudaremos a protegerle. Reitero Henry.
Por el momento debemos averiguar si los chicos malos rondan por el lugar, tenemos a nuestro favor que podemos observar todos sus movimientos en tanto ellos no. Decia Jacob mientras miraba con curiosidad la pantalla de la computadora personal que instalaba Cristin en el pequeño bureau de la habitación.
Yo por mi parte dijo la chica investigare algo acerca de ese truhán ; si tiene expedientes policiacos lo sabré. Lorn pidió a Henry que lo llevase donde habían guardado el auto con el respectivo botín. Cuando este lo llevo fuera de la habitación, Lorn inicio una andanada de preguntas sobre Jacob:
Cómo estás seguro que no nos traicionara? Preguntaba
Porque es su tesoro, dijo Henry, por lo tanto él es quien debería desconfiar de nosotros.
Es verdad, dijo un poco derrotado Lorn. Pero sus ojos destellaron cuando pregunto de nuevo
Y si es una trampa para capturar nuestras almas?
Con qué fin lo haría? Además nos necesita, no puede acabar con la maldición del Atajo hasta encontrar a los quince descendientes de los marineros esclavos que sirvieron en su barco. Una vez que lo logremos su alma descansara, dijo Henry convencido.
Lorn dudo mientras decía: y si lo que dice la leyenda es verdad, si ha tenido tratos con el mismísimo demonio y nuestras almas sean el botín…
Una risa cristalina salió del capitán Jacob, que les seguía sin que ellos se percataran, diciendo:
Tus amigos son en verdad graciosos, dudo que Belcebu esté tan necesitado de almas durante la época que os toco vivir; en cada esquina teneis un pillo, un traficante o un ladrón. Además creo que si en verdad necesitara fuerzas leales iria a vuestro capitolio por unos cuantos congresistas…
Esta vez fueron los tres quienes rieron con ganas. Quizás su esposa Emily tenía algo de razón al decir que los rumores acerca de otras personas eran como una mancha que corría hasta ocultar la verdad. Lorn se sintió un poco más tranquilo. De pronto Frederick advirtió preocupado:
Alguien quiere mi tesoro.
En cuanto llegaron al sitio donde permanecía el auto, notaron a dos hombres tratando de abrirlo.
Lorn les pregunto qué hacían allí? Era su auto.
Pies saco una cuchilla mientras miraba amenazadoramente al dueño de la taberna.
Quieres que te corte viejo? Pregunto con desdén , en tanto su cómplice trato de rodear a Lorn. Henry tomo posición tras el truhán apodado Pies. Jacob cortó sin ambajes el camino del otro tipo haciéndolo caer al suelo estrepitosamente. Pies trato de abalanzarse sobre Lorn, pero una fuerza sobrehumana tomo la mano en la que blandía su puñal, sus gritos de dolor se escucharon dentro del garaje subterráneo. El hombre cayó de rodillas, los pillos miraron a Lorn frente a ellos sin mover un solo dedo, lo que los atacaba era invisible; Pies soltó el arma mientras gritaba a su cómplice que debían huir del lugar.
Los fantasmas y el tabernero quedaron solos, en silencio. Minutos después llegaba Cristin junto a Dumy para decirles lo que recién había logrado descubrir:
El tío de la compraventa tiene cuentas pendientes con la ley por robo, estafa y receptación de artículos robados… tiene un cómplice apodado Pies…
Lorn se acerco a ella diciendo: creo que su cómplice fue el que trato de robar el auto…
Qué dices Lorn, grito Cristin, estás bien, no te hizo daño? Si no llego a casa contigo en una sola pieza Emily me matara, dijo la chica con preocupación.
No ha sido nada, respondió éste, Henry y Jacob me salvaron la vida. Bueno, ya van dos a tu favor amigo dijo a Henry mientras le miraba agradecido. Y caminando hacia el auto lo reviso junto a Cristin y los fantasmas, el tesoro estaba intacto, pero el cofre aún destellaba con un color rojizo
Qué diablos es eso? pregunto Dumy
Es mi alarma contra robo, y abriendo su chaqueta mostro al grupo cómo su piel mostraba el mismo color del cofre. Sera mejor irnos dijo Jacob, esos tipos no se detendrán ante nada. Este pequeño paraíso ha dejado de gustarme.
Nos iremos hoy mismo? pregunto Dumy.
Asi es contestaron al unísono los demás.
Bien, iré a despedirme de alguien dijo Dumy, mientras se alejaba del sitio.
De quién se va a despedir? pregunto Cristin curiosa.
De su nueva amiga la pequeña sirena Cane, dijo Frederick socarronamente
Sirenas… escuche bien o tratan de burlarse de mi ? pregunto Cristin enfadada
No, es cierto, dijo Henry, además creo que el chico está loco por la sirenita.
Cómo lo sabes ? pregunto Lorn
Porque entre los dos hay un tipo de ritual que empieza con insultos y termina con miradas demasiado empalagosas… contesto Jacob
Oh nuestro chico crece… dijo el tabernero burlonamente
Creo que ustedes se equivocan, Dumy es demasiado chico para ello, una novia está fuera de lugar… afirmó algo molesta Cristin.
Soy solo yo, o comienzo a escuchar el cacareo de mamá gallina, dijo Lorn
Los fantasmas rieron con desparpajo, mientras Cristin se quejaba de la actitud del trío.
