Joseph dió la orden de detenerse, confundidos  sintieron el deseo ancestral  de tomar   el cuerpo  de una de su especie  para traer la siguiente generación, pese a ello los  primigenios  no eran seducidos  fácilmente,  su  necesidad de unirse  con   su  linaje primario les  fuerza a   tener controlada esa parte de sus necesidades  reproductivas,  esta vez un  engendro creado de un mestizaje prohibido  rompía dicha regla. 

 Mira a sus hermanos respirar con fuerza,  tendría que intervenir pronto o  se lanzarán  sobre ella,  con firmeza les ordena  traer las cadenas y el cobertor,  de allí en adelante él se haría cargo  de  la cacería,  sería el único  en poder dominar su instinto  de tomar la   fascinante presa que lucía desafiante  ante  ellos. La   batalla  dió  inició, ella esquiva  los golpes que él lanzaba, hasta que un golpe  certero cerca de su cuello hizo que  cayera  de espaldas,   el espectro aprovecha el momento,   pidiendo el cobertor  a toda prisa,  mientras sostenía la respiración  para no caer  en aquel deseo ancestral que quemaba su cuerpo, Anne  intenta resistir,  su cuerpo  presenta batalla, lo que  intensifica el deseo de aquel vampiro primigenio de tomar su presa,  ella se aproxima  al cuello de su  rival  e intenta  morderle, éste  no se contuvo más,  la  ropa de la chica fue rasgada con fuerza y él acomete  sin piedad,  cuando sus hermanos llegan intentan     aplacar  a duras penas  el ataque  de su  hermano mayor, estos también se vieron sorprendidos al mirar  los colmillos de la bruja y el cuello ensangrentado de Joseph,  envolvieron   a la chica y la ataron con cadenas,  la colocaron  en la parte de atrás de la camioneta,  rumbo   a  su casa.  

Anne  se sentía sofocada bajo el peso de  las cadenas, le costaba respirar, un sopor invadió su cuerpo,  sintió el alfanje cerca de su cadera, ni siquiera  pudo  hacer uso de él   durante el   ataque de  aquel  poderoso primigenio.  Sabía que su vida llegaba a su fin,     lo haría ella,  al menos  por primera vez en su vida  decidiría sobre su   destino.  Con dificultad  alcanzó su daga,  pensó por un momento  en la decisión de su madre,   ahora ella  seguiría su camino.  Su boca   esbozó  un rictus de dolor.  ¿Era acaso cosa de familia  morir de esa manera?  
 Mientras  lucha para que su mano  llegue   hasta  la daga,  recordó el ataque de la madriguera,  la mano de aquel   poderoso guerrero intentando  bajar sus ropas con   desesperación luego de que ella atacara su cuello. 
 Todo aquello simuló un ritual de apareamiento entre primordiales, ella ignora por completo    el conocimiento  acerca de rituales   entre  elementales tan poderosos.

Dejo de pensar en ello, la daga se  posiciona  en sus manos,  intenta recordar las palabras  de su  maestro  acerca de los puntos  donde un ataque con arma blanca te haría perder la vida y respirando con lentitud  sintió como el filo del arma se incrustaba cerca de su cuello,  alguna vez alguien dijo que era una forma dulce de dormir,  mientras su cálida sangre  mojaba su prisión  tuvo un sueño donde  corría por un prado  repleto de  pequeñas  flores .

La  alarma entre  los cazadores  fue inmediata en cuanto  bajaron el cuerpo de su prisionera,   Samy, estudiante de medicina aplicó compresas para detener el sangrado, de inmediato la hermana y madre  de los primordiales fue llamada, la sangre de la chica incitaba   de manera   tortuosa  a los varones de la madriguera  .  El  cobertor fue quemado de inmediato  por orden de la madre,  la hermana  había   preparado la bañera,  Joseph fue el encargado  de llevarla  en brazos para  limpiar su sangre,  la hemorragia fue detenida.  El mayor de los Could  tuvo que   reunir toda su fortaleza para no   sucumbir ante el éxtasis que le provocaba aquella   anomalía  como fue llamada por su madre Inés.  Su hermana  Gia no dejaba de admirar  la piel    diamantina de aquella bruja, que también  lucía un par de  impresionantes colmillos y  el  anillo de rubíes  que pertenecía al Gran Maestro.
Anne siguió soñando durante días,  su cuerpo  apenas  se  ha  logrado   recuperar  de la pérdida de sangre,  un suero con  plasma  llegaba  por vía intravenosa a su mano.  El color de sus mejillas  alcanza  un rosa pálido, la marca de la daga queda   como  un adorno alrededor de su pálido cuello.  Pronto ella conocería a sus captores,   una mujer elegante  revisaba  su pulso, una joven de aspecto débil   la miraba   con   recelo  y un jóven era el encargado de revisar  el plasma colocado   en su  mano.  

—Mañana  pueden comenzar  con su alimentación normal,  está mucho mejor. Anuncia el joven.
Ella ni siquiera intenta abrir sus ojos, era un sueño, desaparecería pronto y volvería al campo de flores  a dar interminables paseos.

Pero no fue así, al día siguiente la elegante dama  golpeó sus mejillas  mientras le ordenaba levantarse.
—¡Arriba¡ Es hora de que  te cuides  sola, mi hija Gina está harta de ti.

Aquí hay alguna ropa de ella,  eres  más atlética,   pero servirá en tanto  voy a la ciudad y consigo algo adecuado para ti.  Le dijo con molestia en su voz.

Por primera vez ella pudo ver su prisión,  una habitación  decorada con suma elegancia, un baño   junto a un    vacio  guardarropa ,  pensó que debía ser una habitación de invitados, nada  que indicara algún objeto personal se hallaba en ella.

 Su  ropa de dormir consistía en una camiseta de hombre  que apenas cubría su cuerpo.  Se metió  a la ducha,  su cabello  se extiende  hasta sus caderas,  era un verdadero fastidio, si pudiera encontrar unas tijeras en esa habitación la cortaría hasta la base de su nuca,   la joven hermana de los Could  entra sin avisar,  tirando la ropa sobre la cama.

—Allí tienes   mestiza,   a la hora de comer  te dejare  los alimentos  junto a la puerta, si cuando llegue no has comido los  retiraré y no traeré más,  ¿Me escuchas?  Ah ni  se  te  ocurre intentar escapar, mis hermanos  te  recordarán el por qué   no debes hacerlo.  Le dijo  con  molestia.

Anne dió  un leve  suspiro, de nuevo empiezan  los juegos del odio hacia ella.  Extraño a  Bichito   pero no le llamaría, ese no era un buen entorno para  ambos .  Ellos le recordaron que si no se portaba bien la enviarán  a los calabozos   inferiores,   esta segura de que lo harían. El vestido  que le trajo Gia  le queda demasiado    pequeño,   el cierre en su espalda  aplastaba sus senos de forma dolorosa,  por lo que renuncia a usar   aquella ropa,     una sábana fue  convertida en un sari de hermoso aspecto,  no tenía zapatos,   descalza abrió la puerta de su habitación,  reconocería el sitio,   escapar  puede ser  su  opción más certera,  ignora  los planes que  esa madriguera  tendría para ella

 Un inmenso ventanal que daba hacia un   extenso jardín la hizo detenerse,   en ese momento  Joseph Could detuvo su auto  y al bajarse  eleva su mirada , sus ojos recorrieron  la bellísima mujer  que parecía esperarle, descalza, envuelta en una sábana ,  su sangre se agolpo en su pecho, bajo la mirada, era suficiente con el olor que provenía de aquel  deseado  engendro, rápidamente entro a la casa, la tortura sufrida durante esos días  parecía no terminar, nunca antes sintió   tal deseo por una hembra de su especie,  su mestizaje unía con fuerza  dos  linajes,  el aroma   se unía de una manera  maravillosa, una invitación a  poseerla sin limite, sin leyes,  solo  el simple hecho  de  tomar lo que se ofrecía.  Suspiro con fuerza¡  qué sucedería   con  la descendencia que  vendría de esa unió?  Eso  limita sus ansias.

Su madre solicita la presencia de un elemental  antiguo   para discernir   el origen de aquella mestiza,  éste llegaría al anochecer, antes de eso una jaula de  aislamiento  contendría   a la joven. Cuando  fue colocada  a  la fuerza  dentro  de  la  caja de aislamiento  algo se quebró en ella,  observa  con rencor  a los hermanos Could y baja su mirada, reconoce de antemano   dichas  conductas, eran las que habían convertido su vida en un infierno dentro del clan,  ahora  sería a manos  de aquella madriguera donde revivirá  su pesadilla.  

Joseph sintió una  leve molestia ante la mirada recriminatoria de la bella chica.

El grupo de hombres y mujeres la rodean ,  se sentía como  si estuviese  en un zoológico,  maldijo a sus padres,    usaron la excusa del amor  para  traer una víctima  que no tendría  cabida en ninguno de los mundos.

Cuando  el viejo  hombre dió la orden  en idioma celta   de evidenciar quién era , ella  sintió  una furia candente  recorrer su  esencia,   una luz  se desprende  de su cuerpo,  sus colmillos   se destacan en sus carnosos y rojos labios,   similar a un  arma bien pulida, lista para ser usada,  junto a la belleza deslumbrante de las brujas, el anillo   cobra  vida desplegando  ante la madriguera  unas garras  similares a  las suyas, pero en plata, cual un peligroso guante . Los visitantes miraron sorprendidos aquel sortilegio que condensaba las fuerzas del inframundo,  cuando el    elemental antiguo  pregunta quién era ella   responden dos  voces al unísono :

—Es fruto   de nuestra unión,  la estirpe de las Brujas Primigenias,  y  el  linaje del  Gran Maestro,  es la simiente   futura  que salvará  ambas especies.  

 La sesión  concluye,  la chica  era una  anomalía poderosa  y hasta no entender las consecuencias  de su nacimiento  estaría sujeta a la prisión de la madriguera.